El mercado inmobiliario venezolano se ha convertido en uno de los más atractivos del mundo. Aunque esto no esté ocurriendo debido al crecimiento económico del mercado en nuestro país, sino por todo lo contrario, la realidad es que se está generando una oportunidad para la inversión nunca antes vista.

La situación inflacionaria que vive Venezuela es ampliamente reconocida. Pero si bien la hiperinflación está castigando al sector primario de construcción; el mercado secundario, el relativo a las viviendas de segunda mano, ha crecido.Eso se debe a que gracias al éxodo masivo de venezolanos se ha creado una sobreoferta de espacios ya sean de lujo o no y terrenos sin explotar, por lo que los precios han comenzado a estancarse y en la mayoría de los casos, a descender. Esto significa una inversión a mediano y largo plazo para aquellos que tengan paciencia, que generen ingresos en divisas y apuestan por una recuperación económica. Invertir en inmuebles de alto nivel a unos precios muy competitivos respecto a otros mercados, es una opción de negocio muy interesante.Sin embargoestos precios probablemente no se mantengan demasiado tiempo, inversionistas expertos especulan que para el primer trimestre de este año se dio inicio a un periodo de revalorización que podría mantenerse por un largo tiempo.
Es por ello que compartimos algunas recomendaciones básicas para invertir en bienes raíces.

1. Selecciona en qué tipo de inmuebles invertir;Existe variedad de inmuebles para elegir,entre los residenciales: casas o apartamentos;oficinas, locales comerciales, galpones, turísticos. Es cuestión que evalúes en cual vas a invertir tu capital.

Debes tomar en cuenta tus conocimientos en el manejo de un inmueble a la hora de escoger en cual invertir. Por ejemplo, los inmuebles residenciales pueden ser más fáciles de remodelar para incrementar su valor y alquilar, que los locales comerciales u oficinas; en cambio, el arrendamiento de locales para usos comerciales o industriales puede generar una rentabilidad mayor que una vivienda de uso residencial.

Debes analizar lo que mejor se adapta a tu presupuesto y a la necesidad que tienes de recibir un retorno de la inversión.

2. Evalúa la rentabilidad del inmueble; lo primero que debes considerar es que las propiedades pueden tener un retorno de inversión más lento y de bajo porcentaje frente a otro tipo de inversiones. La diferencia estriba en el alto valor de protección para tus activos, en cuanto a depreciación que ofrece la inversión inmobiliaria.

Por ello, debes mentalizarte que este tipo de inversión es a largo plazo y en algunos casos para el mediano plazo. Sólo así le verás la verdadera rentabilidad al negocio. La revalorización de un inmueble toma su tiempo. Depende de la situación económica de cada país, así como de las mejoras que se hagan en el inmueble.

3. Adquiere viviendas de valor promedio o de alta gama; comprar una propiedad de alta gama en un precio de oportunidad o un valor promedio y venderla tras un plazo de cinco años puede ser un excelente negocio.

Las propiedades de alta gama son una inversión más compleja, ya que su venta puede demorar más de lo normal, dado su elevado valor en el mercado inmobiliario. Sin embargo, las particularidades que tiene su comercialización, se verán satisfechas al tener mayor rentabilidad.

4. No solo compras una propiedad; al comprar una propiedad no sólo compras una propiedad en sí misma, sino también compras la localidad o urbanismo del cual forma parte, por tanto adquieres derechos y deberes con el mismo. En este sentido, es importante que te asegures de que se traten de zonas seguras y con alto potencial de revalorización. Evalúa si existe una oferta de servicios y bondades en el entorno, que incidan positivamente en el valor de la propiedad que quieres comprar.

Asimismo, analiza si el valor del inmueble es competitivo respecto a la localidad donde está ubicado, así como cuáles son los posibles cánones de arrendamiento a los que puedes optar según el inmueble y la zona de ubicación.

5. Busca proyectos o preventas; comprar en planos o en preventas puede ser la gran oportunidad para conseguir un precio que a mediano plazo puede generar una rentabilidad muy jugosa.

Como en toda inversión, hay un porcentaje de riesgo. En el caso de que algún factor externo incida en la construcción del proyecto inmobiliario, tu inversión podría estar en peligro. Por ello, es importante certificar el prestigio y la confiabilidad de la empresa desarrolladora al invertir en proyectos que están en ejecución. 

En fin, invertir en propiedades es una inversión a futuro, que siempre tendrá demanda, ya que las personas siempre necesitarán un lugar donde vivir o trabajar. Con la compra de propiedades puedes tener una rentabilidad ya sea por arrendamiento o por venta a futuro, por lo que tu dinero no pierde su valor. Puedes generar beneficios tributarios, capacidad de ahorro para tu jubilación y por último y no menos importante es un activo que puedes heredar a tu familia.